Antonio Alfaro Fernández (nacido en 1934, casado, dos hijos) cónsul honorario de El Salvador, es secuestrado por ETA (p-m) en su domicilio de Bilbao, donde se presentaron tres hombres armados sobre las siete de la tarde; luego llegó otro encapuchado. A las diez de la noche dos de los terroristas se llevaron al cónsul y los otros dos permanecieron en la casa hasta las 8:30 de la mañana cuando recibieron una llamada.
El objetivo de la acción era llamar la atención de la opinión pública internacional y pedir la liberación de presos vascos encarcelados por actividades terroristas.
Fue puesto en libertad en San Sebastián el 28 de febrero siguiente.
Autoría: ETA (p-m)
Duración: 9 días.