Sobre nueve de la noche, un comando de ETA (p-m) secuestra en Barcelona al presidente del Club de
Tenis de Barcelona y destacado hombre de negocios, Jesús Serra Santamans (nacido el 22 de agosto de 1911), cuando, después de haber cenado en el club de tenis, entró en el garaje de su casa. El secuestrado es directivo del grupo asegurador 'Catalana Occidente' y también consejero de otras empresas.
Los secuestradores pidieron un rescate económico. Durante el cautiverio recibió amenazas de muerte si no pagaban el rescate y escribió cartas a su familia para comunicarles las exigencias de los terroristas. El secuestro no fue reivindicado por la organización ETA.
Según noticias de prensa, el abogado Artemio Zarco obró de mediador en las negociaciones sostenidas entre la familia de Jesús Serra Santamans y sus secuestradores. Al parecer , el rescate fue arrojado de un tren en marcha en Guipúzcoa.
Jesús Serra (68 años) fue puesto en libertad en la madrugada del 31 de mayo en Candasnos (Huesca), atado y con los ojos vendados, dentro de un saco de dormir.
En noviembre de 1980, la Guardia Civil localizó el lugar donde estuvo secuestrado Jesús Serra y detuvó a varios de los posibles autores del hecho. En enero de 1982, se detuvo a otros de los implicados.
Jesús Serra (68 años) fue puesto en libertad en la madrugada del 31 de mayo en Candasnos (Huesca), atado y con los ojos vendados, dentro de un saco de dormir.
En noviembre de 1980, la Guardia Civil localizó el lugar donde estuvo secuestrado Jesús Serra y detuvó a varios de los posibles autores del hecho. En enero de 1982, se detuvo a otros de los implicados.
En diciembre de 1982, la Audiencia Nacional condenó a varios miembros de ETA Político-militar como autores del secuestro: Jesús Javier Urquijo Muruaga, a dieciséis años de prisión; María Arrate Elcoroidibe Garaitano y José María Iza Unamuno, a catorce años y dos meses cada uno, como autores de delitos de detención ilegal y utilización ilegítima de vehículo ajeno.
La sentencia condenó también a un año por detención ilegal a Jacinto Múgica Ollarbide, Manuel Aramendi Alberro, Juan Gregorio Egusquizaga Ibarrondo, José Luis Gutiérrez García y Gloria Gutiérrez Fonbellida. Según la sentencia, los condenados deberán indemnizar con 150 millones de pesetas a Jesús Serra, cantidad que su familia pagó en concepto de rescate y que no fue recuperada.
La sentencia declara probado que María Arrate, junto a dos etarras declarados rebeldes, sustrajeron en Barcelona un coche a punta de pistola con el que se trasladaron al domicilio del industrial catalán, donde intimidaron con sus armas al industrial y lo trasladaron en el vehículo de su propiedad a un lugar desconocido, donde lo cambiaron de automóvil. Por último, en un camión-trailer, Serra fue trasladado al caserío 'Etxupel', en Amezqueta (Guipúzcoa), propiedad de los procesados Jacinto Múgica y Manuel Aramendi, donde permaneció en un reducido habitáculo hasta su liberación.
Jesús Serra falleció el 18 de diciembre de 2005.
Autoría: ETA (p-m)
Duración: 66 días
Autoría: ETA (p-m)
Duración: 66 días